Cuando estás en casa sin hacer nada, lo mejor que puedes hacer es darte una vuelta por el desván, seguro que encuentras cosas que pensabas perdidas, o dañadas, o esas reliquias que no habías visto desde hace años y que ahora fíjate por donde le vas a dar un uso. Suele pasarnos a todos, casi todas las personas tenemos un poco de Síndrome de Diógenes, vamos almacenando cosas con siempre la misma coletilla, por si acaso.
Ahora bien, la cosa casi siempre se nos va de las manos y acabamos llenando una habitación de trastos inservibles o en cualquier caso, cosas que si que funcionan y en algún momento han sido útiles pero que ya pasaron de moda o ya no es necesario porque ya se ha quedado obsoleto. Es curios la cantidad de cosas que podemos llegar a guardar, en casa había de todo, la raqueta de cuando jugaba al tenis, la cuna de mi hijo que ya tiene diecinueve años, varios juguetes, bueno mejor dicho, varias cajas llenas de juguetes, ropas, accesorios, algún que otro pequeño electrodomésticos, e incluso unos expositores que compré una vez en expositores-metacrilato.es para poner los panfletos de la sucursal y que después de un tiempo dándoles uso los acabé llevando a casa para guardarlos. Creo que los volveré a sacar y los llevaré al banco de nuevo, así pondré uno en mi mesa con las nuevas promociones de los créditos.
La verdad es que siempre se ha dicho que quien guarda haya y efectivamente así es, yo guardé y ahora hallé. Es gracioso como somos las personas, somos capaces de vender las cosas que tenemos en nuestros desvanes en las tiendas de segunda mano, pero luego nos da como un poco de llamémoslo vergüenza comprar algo usado, preferimos comprar algo nuevo aunque sepamos que el que hay de segunda mano está en perfectas condiciones, no sé si lo hacemos por vanidad, por vergüenza o por vete tú a saber qué, pero a nadie le gusta reconocer que la prenda nueva que lleva o la última adquisición que hay en su casa es de segunda mano. No nos sentimos orgullosos de algo que hemos comprado de segunda mano ¿por qué será? Yo la verdad es que no lo sé. Lo que tengo claro es que la cuna, la raqueta y todos esos juguetes van a ser vendidos a una tienda de segunda mano.
Comentarios recientes